Tal y como explica Michael Berger en el prólogo, la idea de La empresa E-myth es sencilla. Una empresa es producto de la imaginación de un emprendedor. Es un producto visual, un producto emocional, un producto funcional y un producto económico. La empresa es el objetivo más creativo y emocionante al que podemos aspirar. También es extraordinariamente creativo… si se hace bien. Y con este planteamiento elabora todo un manual para construir una empresa de éxito en un sistema de libre mercado.
Me ha gustado mucho el libro por una razón muy sencilla. Es tan evidente lo que plantea que creo que nos hemos empeñado en complicarlo todo y ahora estamos en multitud de aspectos que aportan poco valor a los clientes, los empleados, los proveedores y las entidades de crédito. Por ejemplo Gerber explica que “las empresas existen sólo porque la gente quiere que existan” y matiza «como si las personas existieran gracias a las empresas» Tiene todo el sentido ¿verdad? Pues parece que algunas organizaciones funcionan justo al revés.
Según el autor, la empresa E-myth es obra de una persona que posee cinco capacidades básicas: concentración, discernimiento o habilidad para escoger sobre qué, dónde y sobre quién dirigiremos nuestra atención y nuestra capacidad de concentración, organización, innovación y por último, comunicación.
La historia del capítulo 3: las cuatro preferencias de categoría, donde habla de John Anderson y su Ford Coupé de 1947, me parece de lectura obligatoria para todos aquellos que se dedican al mundo del marketing y la gestión comercial. Cómo alguien puede controlar todos los aspectos de la venta de una manera tan precisa es sencillamente brillante.
Partiendo de esta historia, Berger incide en el hecho de que hay cuatro categorías de preferencia que toda empresa ha de satisfacer en la mente y en el corazón de las cuatro influencias fundamentales: preferencias visuales, preferencias emocionales, preferencias funcionales y preferencias económicas. Para terminar con la perspectiva E-myth que os animo a descubrir en la parte final de este excelente libro (pablo jiménez – otromarketing.es)